Sus playas. Uno de los mayores atractivos de la ciudad de Gijón es la Playa de San Lorenzo, una playa urbana que se puede disfrutar en cualquier estación del año para pasear, practicar deporte, tomar el sol… Su paseo, conocido como el Muro, es lugar de encuentro de los gijoneses y marca el pulso de la ciudad.
Pero en el concejo de Gijón podemos encontrar otras playas a 10 minutos en coche, como Estaño o Peñarrubia, pequeñas calas donde disfrutar del Cantábrico. Existe una senda a lo largo de la costa que permite llegar a estas playas disfrutando de maravillosas vistas del campo y el mar. Después de andar por la senda te recomendamos descansar en los mejores apartahoteles en Gijón: los de Moros 41.
Su cultura. Laboral ciudad de la cultura, situado en la antigua universidad laboral fundada en tiempos de Franco y recuperada recientemente para la ciudad, quizás sea el edificio más emblemático de la ciudad. Alberga una gran teatro, jardines visitables, con agradable terraza en verano, y en sus cercanías se encuentra Laboral Centro de Arte, laboratorio de nuevas tendencias artísticas y sede de importantes exposiciones.
Pero no debemos olvidar los museos de la ciudad: el Jovellanos, el Piñole, el Barjola, el Evaristo Valle, con sus maravillosos jardines, o el del Pueblo de Asturias. Pintura, escultura, videoarte, etnografía…, todo tiene cabida en los museos de Gijón. Alquiler de apartamentos en Gijón
Su gastronomía. Las sidrerías son los bares más típicos de Asturias, y la sidra su bebida más emblemática. En Gijón hay un gran número de estos establecimientos repartidos por todos sus barrios donde se celebran muchas bodas Gijón. Quizás los más típicos se encuentren en el barrio de Cimadevilla y aledaños, allí se puede disfrutar de pescados y mariscos del Cantábrico (y en temporada los famosos oricios) y de la muy recomendable la ternera asturiana, imprescindible probar el cachopo.
También hay restaurantes para comer en Gijón de autor, de pinchos, italianos… de primera. Mención aparte merecen las pastelerías de la ciudad: princesitas, merengues, milhojas, macarrons…, todo para deleite de los golosos.
Su naturaleza. Hay multitud de sendas que recorren el concejo de Gijón, bucólicas zonas rurales que mantienen el encanto de las aldeas de antaño. Nos podemos encontrar carbayeras (robledales) de carbayos centenarios, antiguos lavaderos o fantásticas áreas de descanso, como la del el Monte Deva, con unas magníficas vistas de la ciudad.Y después a decancar en los apartamentos en Gijón por días.
En este apartado es necesario destacar el Jardín Botánico Atlántico, con una parte de jardines históricos de gran belleza y ejemplares únicos de árboles, y otra más reciente donde se reproduce la vegetación típica de las zonas atlánticas. Hay además multitud de talleres y actividades para toda la familia.
El Elogio del horizonte. Esta escultura de Eduardo Chillida, convertida en emblema de la ciudad, reúne casi todos los puntos enunciados anteriormente: naturaleza, pues se encuentra en una zona verde situada en pleno centro urbano, el Cerro de Santa Catalina; mar y playa, desde el interior de la escultura hay unas impresionantes vistas del litoral y de la playa de San Lorenzo; cultura, esta es una de las obras de las que Chillida se sentía más orgulloso, sobre todo, en cuanto a su ubicación.