Incentivar al ahorro y prever una estabilidad económica a futuro es el resultado positivo cuando los niños tienen educación financiera. En un inicio se pueden introducir a los conceptos más fáciles de las finanzas, tales como priorizar las compras y buscar nuevas alternativas.
Cualquier niño se le puede enseñar a ahorrar, demostrarles el valor del dinero y crear hábitos de consumo responsables. También hay que mencionar que los créditos en 10 minutos son de mucha utilidad, pero siempre se debe devolver el dinero. No es un juego mantener un control eficiente de las finanzas, sino una responsabilidad. Por eso es importante que los hijos tengan educación financiera desde pequeños mediante los siguientes 4 consejos:
Ser el modelo a seguir
Si los hijos ven que sus padres malgastan el dinero, compras cosas innecesarias o consumen mucho a diario, no van a saber cómo ahorrar. Cada día la publicidad es más directa y masificada, promueve a los gastos elevados. Aunque es posible ser un consumidor responsable. Los padres pueden elaborar una lista donde anoten los gastos esenciales del mes y ahorrar el resto del dinero en una cuenta de ahorros. Así se controlan los gastos, se ahorra y todos se adaptan al presupuesto mes a mes.
Aclarar la procedencia del dinero
Los niños suelen pensar que el dinero es fácil de conseguir porque los padres les dan lo que desean. Es prudente poner límites y explicar que para comprar algo, primero hay que conseguir el dinero. Un buen consejo es que conozcan que el dinero proviene de un empleo donde se invierten largas horas de trabajo. También, los prestamistas son una opción si se tienen ingresos fijos para pagar.
Promover el ahorro en los niños
Que los hijos sean conscientes de la administración del dinero permite que no lo gasten de forma desmedida. Es una técnica funcional entregar la mesada para la escuela con la condición de que ahorren un ligero porcentaje cada semana. La idea es tener un objetivo final, así gestionarán correctamente los hábitos de consumo. La inversión también es un gran aprendizaje para los niños, si aplican métodos correctos pueden multiplicar las ganancias. Por ejemplo, al vender limonadas, helados o postres.
Usar Apps y juegos financieros
Monopoly es un juego divertido que enseña sobre financias, ya que se debe administrar el dinero, comprar lo necesario y ser responsables con los gastos. Existen aplicaciones digitales que explican sobre cómo ahorrar, cómo planificar un presupuesto y cuál es la mejor manera de priorizar los gastos.